domingo, 15 de marzo de 2009





La prostituta





Charlot ejerce como prostituta. Pasa su vida de hotel en hotel, de club en club desde hace más de diez años. Tuvo muy pronto a su hijo Kevin al que dejo en su país de origen con su madre, viniéndose a Europa a conseguir dinero ya que el padre de Kevin desapareció al saber que Charlot sería madre. Ella enviaba dinero habitualmente y dos o tres veces al año viajaba para ver a su hijo. Quería marcharse en breve, cuando reuniera una cantidad suficiente pero mientras, su realidad era acostarse cada día con quien pagara su precio.


Su vida un circulo vicioso, porque nunca conseguía el dinero necesario ya que para aguantar el día a día consumía cocaína lo que ralentizaba el proceso. Uno de sus mejores clientes era Jac. Llevaba casado más de veinte años y tenía dos hijos. Su esposa le había querido siempre con locura pero el prefería quemar su vida de barra en barra.


Uno de los peores días en la vida de Jac fue sin duda cuando estando en uno de estos clubs, precisamente charlando con Charlot la prostituta, entraban en el local unos muchachos que parecían estar de despedida y entre ellos su hijo y sus amigos. El encuentro no fue nada grato para ambos.


Este hecho marco un antes y un después en la vida de Jac aunque quizás ya era un poco tarde. Su mujer tenia ya preparados los papeles del divorcio hacia meses y poco después lo abandonaría para siempre. Empezaría una nueva vida a la que tanto derecho tenía y tratando de recuperar tantos años perdidos a la sombra de alguien que no la supo valorar.

4 comentarios:

Domingo dijo...

Ójala no hubiera ninguna Charlot que tuvieran que degradarse vendiendo su cuerpo por necesidad.

A ver si la mujer de Jac puede ser feliz, no se la merecía.

Miguel González Aranda dijo...

Mientras haya JACssss, que siempre los habrá, nunca faltarán las CHARLOTsss.

Salud

Alberto dijo...

Dos vidas diferentes, quizá merecedoras de un cambio mutuo.

Tendrías que hacer un día una historia con todos los personajes de los "relatos cortos".

Curioso megamix.

Bye

Oscar dijo...

¿Me he quivocado de blog, no? Yo buscaba el de Friki, con sus historias sórdidas y anodinas: arg...